Los dos países abogan en el Consejo de Seguridad de la ONU por el abandono de las pruebas nucleares y de misiles por Pionyang a cambio de la suspensión de los ejercicios de Washington y Seúl en el mar de Japón.
La delegación rusa en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha apoyado la propuesta de China sobre el "cese mutuo" de las actividades que la parte estadounidense y norcoreana perciben como la máxima amenaza para su seguridad.
Pionyang debería dejar a un lado su programa nuclear y armamentista, mientras que Washington y Seúl suspenderían sus ejercicios programados cerca de las costas de Corea del Norte, ha explicado el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Guennadi Gatílov, en un comentario concedido a TASS.
Todos los participantes del debate en torno al reciente lanzamiento de un misil han coincidido en la necesidad de poner fin al desarrollo por Pionyang de las armas nucleares y los medios para su transporte. Las delegaciones han sido unánimes en exhortar que Corea del Norte cumpla con las resoluciones al respecto adoptadas por el Consejo de Seguridad en el 2016 y antes de esa fecha.
"Al mismo tiempo hubo un llamamiento a buscar necesariamente una solución político-diplomática del problema nuclear en la península coreana", ha destacado el diplomático ruso. China propuso el "cese recíproco" de las pruebas norcoreanas y los simulacros cerca de sus costas, programados por las Armadas de EE.UU. y Corea del Sur. Rusia apoyó esta iniciativa "a modo de un punto de partida para las negociaciones políticas", ha explicado el viceministro.
Sin embargo, la reunión terminó sin que los países miembros del Consejo adopten una resolución al respecto.
Los diplomáticos rusos han instado también a que EE.UU. y Corea del Sur revisen su decisión de desplegar el sistema de defensa antiaérea THAAD, como un "factor desestabilizador adicional" en la península coreana, informa TASS.