Este interesante tema, sólo nos muestra nuestra ignorancia y estupidez al juzgar a los demás por su color de piel y otros rasgos físicos,pero es decepcionante que en la actualidad aún exista gente racista.
Uno de los primeros antecedentes de los zoológicos humanos fue la colección de Moctezuma en México, la cual no solo consistía en un auténtico zoológico, lleno de diversos animales importados de toda Mesoamérica y Aridoamérica, sino que también exhibía a personas poco comunes como enanos, albinos y jorobados.En el Renacimiento, los Médici, crearon una importante colección de animales en el Vaticano. En el siglo XVI, el cardenal Hipólito de Médicis tenía una colección de gente de diferentes razas. El mismo dijo que entre sus "bárbaros" se escuchaban hasta 20 idiomas, ya que tenía entre su "colección", moros, tártaros, indios, turcos y africanos.
Uno de las primeras exhibiciones públicas de humanos fue la exhibición de P.T. Barnum de la mítica supercentenaria de 161 años, Joice Heth el 25 de febrero de 1835 y, luego, los siameses Chang y Eng Bunker. Sin embargo, la noción de la curiosidad sobre otros humanos tiene una historia tan larga como el colonialismo. Por ejemplo, Cristóbal Colón lleva indígenas de sus viajes al Nuevo Mundo a la corte castellana en 1493. Otro famoso ejemplo fue Saartjie Baartman de la nación namaqua, con frecuencia referenciada como la Venus Hotentote, que fue lisa y llanamente exhibida en Londres hasta su deceso en 1815. Durante los 1850s, Máximo y Bartola, dos niños microcefálicos de México, se exhibieron en EE.UU. y en Europa bajo los nombres de "Niños Aztecas" y "Liliputienses Aztecas" . Sin embargo, los zoológicos humanos se volvieron comunes solo en los 1870s, o sea a mediados del periodo del Nuevo Imperialismo.
París, 1889: Desde el 6 de mayo hasta el 31 de octubre se celebró en París el centenario de la revolución en una Exposición Universal. En el marco de la celebración de igualdad, fraternidad y libertad, se exhibieron once indígenas Selk´nam (Onas). Maurice Maître
raptó en la bahía San Felipe a toda una familia, a quienes llevó atados con cadenas. De los once, dos murieron en el viaje.
Fueron presentados tras rejas como caníbales, todas las tardes les arrojaban carne cruda de caballo y los mantuvieron sucios y sin posibilidades de higiene, para que tuvieran la apariencia de salvajes, todo para obtener beneficios comerciales. Ante las inhumanas condiciones de la exposición la S.A. Missionary Society comenzó a exigir la liberación y el retorno de esta familia a Tierra del Fuego. Fue tal la presión que obligó a Maître a cancelar la gira por Inglaterra y se fueron a Bélgica.
De los once Selk´nam solo siete llegaron con vida a Petit-Carmes en Bélgica. Una vez en Bruselas fueron exhibidos en el Musée du Nord, el cual ofrecía una amplia variedad de atracciones, desde equipos eléctronicos hasta obras de teatro con actores enanos. Fue en este contexto que el grupo de siete Selk´nam fueron encarcelados por la policía belga en la sección de extranjeros. Tras este episodio, Maîtres y el grupo de Selknam, volvieron a Inglaterra desde donde se embarcaron de regreso a Tierra del Fuego. De los once regresaron seis.