Según el diario Star de Kenia, informa que testigos afirman que el cuerpo del joven llegó al hospital sin signos vitales, tras intentar suicidarse ingiriendo insecticidas. Después de declararse la muerte se realizó el procedimiento legal: se le informó a la familia y el cuerpo "sin vida" de Mutora fue trasladado a la morgue.
"Lo que pudo haber ocurrido es que el insecticida bajó los niveles de pulsaciones del corazón y no las detectamos, por eso lo declaramos muerto", citó el diario Star al médico Joseph Mburu, jefe del Hospital Naivasha.
Los empleados de la morgue cuentan que empezaron a escuchar ruidos y golpes en el lugar donde estaban los cadáveres. "Cuando ingresamos al lugar vimos que el cuerpo de Mutora se movía y estaba respirando. Es cuando comenzamos a gritar de pánico", relató uno de los testigos.
"Lo primero que haré es pedirle disculpas a mi padre por hacerlo pasar por esto", fue la única declaración del joven a los medios.